Bienvenidos una vez más a ¿Qué hay de nuevo viejo? En esta ocasión vamos a hablar sobre unos chicles que marcaron a una generación entera.

Boomer forma parte de la memoria colectiva de toda una generación para la que su sabor aún perdura en el paladar. Este famoso chicle llevaba azúcar, algo que parece impensable hoy en día por el riesgo de caries y abarcó un gran éxito desde finales de los 80, en los 90 y comienzos de los 2000.

Entonces eran habituales en los recreos y a la salida de los colegios. Costaban alrededor de 5 pesetas, y por aquel entonces competían con los también muy populares Bubbaloo, rellenos de una especie de sirope de sabores. Costaban casi el doble por lo que la balanza vencía más de una vez hacía los Boomer.

Había Boomer de sabores que hoy en día costaría encontrar; fresa ácida, melón, sandía, cola, menta, plátano relleno de chocolate, manzana, mandarina, frutas del bosque, coco, cereza, kiwi, regaliz, o natillas… y tenían un tamaño bastante considerable para ser un chicle, algo que también jugaba a su favor, más chicle por menos dinero.

Pero la compañía no solo innovó con los sabores de sus chicles, también lo hizo con los formatos, es el caso del revolucionario ‘Kilométrico de Boomer’ que sobrepasaba el metro de largo y que permitía elegir la cantidad de chicle que deseábamos masticar en cada momento.

En 2002 con el cambio al euro, el Boomer pasó a costar 5 céntimos y redujo su tamaño. Poco a poco la marca fue desdibujándose del mercado hasta cerrar finalmente su fábrica de Tarazona (Zaragoza).

Estos chicles son inseparables de la imagen de su mascota, llamada Boomer, un superhéroe vestido con mallas azules de lycra capaz de estirarse al igual que los chicles que promocionaba al más puro estilo Capitán América. Boomer ayudaba a los niños en situaciones complicadas, a punto de ser devorados por una enorme planta carnívora o aplastados por un meteorito que se precipitaba desde el espacio. La celebración, como no podía ser de otra manera, con barra libre de chicles.

¿Conocías los chicles? ¿Cuál era tu sabor favorito? ¿Te gustaría que volvieran?

¿Quieres hacerte con la estampilla anterior? ¡Sé el primero en contestar correctamente el siguiente acertijo y consíguela!